¿Pero a qué precio?
Una fatídica noche, Rufus se despierta de una inquietante pesadilla: se sacrificó para salvar a Deponia. Como el último deponiano superviviente, luchó contra unos pocos candados salvajes, pero al final, solo había una salida: ¡tenía que hacer estallar a Deponia! Elysium, la ciudad flotante se estrelló contra el planeta.